No cabe dudas que el secretario general de Palacio de Gobierno, Bruno Pacheco tiene siete vidas o quizás más. Se aferra a su puesto. No le importa que la propia Premier Mirtha Vásquez le haya pedido la renuncia y el propio Vladimir Cerrón lo cuestiona y le dice al Presidente Pedro Castillo cuando lo saca.
Supo hacerse el muertito. Supo hacerse el inocente ante las denuncias de los Comandantes Generales FAP y del EP. Y manejo su tema a su manera. El entorno de Castillo le cree. Pero salió la denuncia con chat incluido sobre como presiona a la Sunat. El tema es escandaloso y más allá de la ayuda a los amigos, se notan visos de corrupción y amerita una investigación.
Y le corresponde al propio Castillo quien el fin de semana advirtió que si algún funcionario de su gobierno está en actos de corrupción los iba a retirar. A ver demuestre Señor Presidente, si quiere que el país le crea, aquí tiene una buena oportunidad.
La fiscal de la Nación, Zoraida Ávalos, inició una investigación preliminar contra Walter Ayala y Bruno Pacheco, además de los que resulten responsables por las presuntas presiones desde el Ejecutivo para influir en los ascensos.
No es la primera vez que Arnulfo Bruno Pacheco Castillo es cuestionado. Tiene denuncias policiales por daños y violencia psicológica desde el 2013 al 2019. Aun así, fue designado como Secretario General de la Presidencia el 30 de julio mediante la resolución Suprema N° 083-2021-PCM.
Aunque permanece al lado del presidente Pedro Castillo desde que se desempeñaba como líder sindical en Cajamarca, los lazos se fortalecieron durante la campaña presidencial, llegando a convertirse en su mano derecha y luego Secretario General de Palacio. Sin embargo, dos días antes de que Pedro Castillo tenga en su poder la banda presidencial, se cambiaron los requisitos para asumir el puesto de secretario general.