La Conferencia Episcopal Peruana pidió al presidente Pedro Castillo, y a la presidenta del Congreso, Lady Camones, que no se establezca una conmemoración especial el 30 de agosto de cada año, el mismo día que se celebra a Santa Rosa de Lima.
“Pedimos mantener incólume la festividad de Santa Rosa de Lima el 30 de agosto, respondiendo así al sentimiento de millones de peruanos que veneran a la Primera Santa de América y Embajadora Espiritual del Perú en el Mundo”, señalan en el documento que compartieron por redes sociales.
Los representantes de la Iglesia enviaron el documento que también fue compartido por el monseñor Miguel Cabrejos luego que el Gobierno enviara al Poder Legislativo un proyecto de ley que plantea que el 30 de agosto sea declarado “Día Nacional de personas desaparecidas durante el periodo de violencia 1980-2000″.
“Introducir en la Fiesta de Santa Rosa de Lima una conmemoración paralela el mismo día, afectaría directamente la celebración de esta expresión de religiosidad popular extendida por todo el Perú”, advierten.
La Conferencia Episcopal destaca que esta fecha en honor a la Patrona de América y las Filipinas une a las familias peruanas y fortalece “la fe y la esperanza de nuestro pueblo por construir un país fraterno y solidario”.
“Hoy día que se busca promover y revalorizar a la mujer, no se puede minimizar la imagen y vida de Santa Rosa de Lima, mujer laica, insigne santa peruana, modelo de entrega y servicio a los más vulnerables de la sociedad”, destacan.