El docente de Pacifico Business School, Jorge Carrillo Acosta, sostuvo que la coyuntura económica de exceso de liquidez en los mercados es oportuna para que las empresas opten por el reperfilamiento de sus deudas con mejores condiciones de pago.
“El mercado tiene mucha liquidez. Es decir, los bancos, cajas y financieras tienen mucho dinero y pocos clientes para prestarles”.
El profesor de la Universidad del Pacífico (UP) explicó que, dada la circunstancia de exceso de liquidez en los mercados, hay tasas de interés bastante aceptables en los mercados financieros.
No obstante, dijo que es fundamental tener en cuenta la capacidad de pago de la empresa interesada.
“Lamentablemente, muchas empresas aún no llegan a recuperar el flujo de ingresos que tenían en una etapa pre covid-19. Con ello han perdido capacidad de pago inmediata y eso ya genera una necesidad de reperfilamiento de la deuda”, comentó.
Refirió que una de las principales ventajas que podría obtener una empresa bien calificada con el reperfilamiento de su deuda, es la de extender plazos, acceder a algunos períodos de gracia, entre otros.
“Si una empresa se está recuperando, pero aún no llega a registrar los niveles pre covid-19, o si a pesar de recuperar sus ventas viene arrastrando una deuda grande, ahora tiene la oportunidad de aprovechar las bajas tasas de interés que hay en el mercado, sobre todo aquellos buenos clientes que estén bien calificados”, subrayó.
Sin embargo, Carrillo refirió que ello dependerá básicamente del giro del negocio de la empresa.
“Hay giros que se han venido recuperando como el textil, electrodomésticos y restaurantes, que han entrado a un proceso de recuperación. Todavía no están en un nivel pre covid-19 pero ya reportan ingresos”, dijo.
En tal sentido, explicó que las empresas de estos rubros tendrán más facilidad para reperfilar sus deudas que una del sector turismo, por ejemplo.
Para las empresas que están reportando ingresos y tienen la oportunidad de hacer un reperfilamiento de su deuda, Carrillo recomendó:
Primero deben proyectar bien cuánto van a vender. Hay que hacer una estimación seria y responsable de cuánto venderán y cuánto ganarán para evitar pedir un préstamo que no podrán pagar. “Hay que ser responsables con las proyecciones”, dijo.
No pedir períodos de gracia que no se necesiten. Si sabe que va a recuperar su nivel de ingresos en tres meses para qué pedir más meses de gracia. Eso le va a generar más intereses.
Debe poner atención en la TCEA (Tasa de Costo Efectivo Anual). Eso lo ayudará a hacer una comparación real entre entidades financieras para tomar una mejor decisión.
“Hay que tener mucho cuidado con este tema. A veces una persona puede optar por el crédito más inmediato, pero eso no significa necesariamente que sea el más conveniente”, subrayó finalmente Jorge Carrillo Acosta.