La actual secretaria general del Ministerio de Transportes y Comunicaciones, Sandra Ramos Flores, está bajo la mira del Ministerio Público y de la Contraloría General de la República. La funcionaria es investigada por concusión, cohecho pasivo y negociación incompatible. Su paso por diversas entidades del Estado ha dejado un reguero de irregularidades, como en Essalud,y la Intendencia de Bomberos, por la millonaria compra de medicamentos y equipos, sin cumplir con los requisitos y condiciones que exige la Ley de Contrataciones del Estado. También estaría involucrada en el cobro de cupos en Saludpol ¿Qué está esperando el ministro César Sandoval