En este tiempo que nos ha tocado vivir por la pandemia del covid- 19, una de las preocupaciones de los padres es la ausencia de actividad física en sus menores hijos. Así la natación es uno de los deportes que, con las adecuadas prácticas de bioseguridad, puede practicarse en el país, según el especialista Jorge Orlando Huertas Pineda.
«Somos básicamente agua, ya que venimos de un ambiente acuático desde el vientre materno», anotó.
Sostuvo que el secreto está en comenzar a muy temprana edad la natación, porque en su práctica interviene un gran número de músculos y, lo más importante, el medio acuático es ideal para mantener sano nuestro sistema cardiovascular, al regular el colesterol y prevenir la obesidad.
«Hoy en día, que nuestros hijos puedan practicar la natación no solo ayuda a combatir la rutina del confinamiento y distanciamiento social», añadió.
En el caso de los bebés la práctica de la natación los favorece en su desarrollo de coordinación motora; ya que les permite tomar conciencia de sus extremidades; lo cual los ayudará no solo para el momento del gateo, sino para un desarrollo óptimo del niño.
“Nos encanta ver como los bebés pierden el miedo al agua y convierten esta práctica deportiva en un momento con los padres; donde se interactúa de manera lúdica”, refirió el profesor de la academia deportiva JH.
En esta nueva normalidad, los alumnos pueden tomar clases con carriles únicos, mientras que el instructor trabaja con protector facial en el agua y la respectiva prueba covid-19, agregó Huertas.
Añadió que hay un estricto control en el tratamiento del agua para evitar todo tipo de contagios, mediante el nivel del cloro y PH, el mismo que constantemente es supervisado por las municipalidades como parte del protocolo que ha permitido regresar a la práctica de este deporte.
