Cotrap – Apoip son las siglas del gremio que reúne 600 empresas formales de ámbito nacional y tiene en planilla a 80 mil trabajadores. La Confederación de Transportistas Terrestres del Perú y la Asociación de Propietarios de Omnibus Interprovinciales manifestó su abierto rechazo a la toma de carreteras como medida de presión al débil gobierno de Francisco Sagasti.
El bloqueo de vías impidió el desplazamiento de 1500 vehículos de Transporte interprovincial que trasladaban 75 mil personas. Un solo día de bloqueos en la Panamericana, hace que las empresas agremiadas pierdan 35 millones de soles diarios (20 millones en traslados de personas y 15 millones en encomiendas).
“Como si la pandemia del Covid 19 no fuera suficiente amenaza para la vida, ahora denunciamos que varios ómnibus de transporte interprovincial fueron retenidos ilegalmente en la localidad de Virú (La Libertad) con pasajeros y todo por grupos de violentistas que, más que agricultores, parecían delincuentes comunes. Lamentamos que las autoridades no asuman la responsabilidad para cumplir con el mandato constitucional de garantizar el libre tránsito”, señaló, Martín Ojeda, gerente general del gremio de transportistas interprovinciales formales.
Para el gremio de transportistas la toma de carreteras se ha convertido en un problema estructural del país, que genera importantes pérdidas económicas en negocios frustrados, así como horas de trabajo perdidas de empleados y viajeros que serán muy difíciles de recuperar.
“Protestar es un derecho, pero atentar contra la libertad de los viajeros es ilegal, Usurpar vías nacionales, sin ningún tipo de garantías ni responsabilidades, es irresponsable. En Palacio de Gobierno se reacciona lentamente ante la extorsión que los violentistas realizan contra todos los peruanos, además, ¿dónde están los fiscales que no acusan a quienes cometen delitos bloqueando vías?”, concluyó Ojeda.